viernes, 26 de octubre de 2012

ME GUSTARIA VISITAR PUNO

Me gustaría visitar Puno en su fiesta de noviembre. Llegar y recorrer mi Ciudad como yo la recuerdo todavía. Aprovecharía la visita para entusiasmarme con la programación de la fiesta. Desde la exhibición de wawas de pan y bizcocho, galletas, maicillos y alfajores, hasta la desbordante alegría de su juventud estudiantil designando su Reyna, empapelando su local y proclamando liderazgo.  Me daría tiempo para abrazar familias de antaño, evocar sus chismes, sus alegrías, sus tomaduras de pelo.

Siempre lo hice y esta vez también:  alternar con representantes de la Bohemia Puneña para aprender canciones de moda, captar wayñitos nuevos e intercambiar novedades "de acá y de allá". Cantaría para ellos algunas zambitas del recuerdo. Por ejemplo: "Cuando se acorten los días junto a mi sombra y mi alma caiga sangrando al atardecer; yo levantaré mis ojos pidiendo al Cielo volverte a ver, volverte a ver. Vuela, vuela golondrina; vuelve del más allá. Vuelve desde el fondo de la vida sobre la luz, cruzando el mar, cruzando el mar." ("Golondrinas", Eduardo Falú).

Finalmente -y sólo en secreto para Ti- me gustaría visitar Puno en su fiesta de noviembre para tratar de encontrar rasgos imperturbables de aquellos tiempos: en el rumor del viento acercándose desde Ventilla; en la esperanza subiendo al Azoguini y en la seguridad de que aquellos cambios de matiz de las nubes alrededor del Cancharani, son presagios de una granizada segura.